Está ubicado en el extremo sur del golfo Nuevo, en la provincia del Chubut.
Su construcción estuvo a cargo del torrero de Segunda Alfredo Vineis, el Operario de Primera Nicolás Di Vicenzo, el Guardián de Segunda Antonio Pietraccone y 10 conscriptos de la dotación del Balizador Ara “Alférez Mackinlay”.
Su estructura consta de una torre troncopiramidal de hierro color negro, de 10 metros de altura, alimentado por gas acetileno, en sus orígenes lo que le daba un alcance luminoso de 15,3 millas
En marzo de 1986 se reemplazó la fuente de energía y se instalaron paneles solares y baterías fotovoltaicas, elementos que le otorgaron un alcance luminoso de 10,5 millas náuticas.
siglos V y VI
Primeros faros registrados
Los primeros Faros registrados fueron construidos por los griegos en los siglos V y VI a. de C., con el propósito de marcar las entradas de puertos como El Pireo.
La Argentina ofrece numerosas alternativas turísticas y culturales que hacen de este país un paso obligado para todo amante de la navegación y la náutica.
A su extensa costa marítima, que toca el suelo argentino de manera interrumpida desde Buenos Aires hasta la austral Tierra del Fuego, se le suman caudalosos y transitados ríos internos, entre los que se destacan el Río de la Plata, el Paraná, el Uruguay, el Negro y el Pilcomayo.
A la enorme vida fluvial del país, debemos agregar como atractivo, la proliferación de faros, construidos en diferentes épocas y con diversos materiales y estructuras, para la orientación de los navegantes que recorren las aguas de esta región.
Además de su rol principal, el orientar a los navegantes de los ríos y mares, poseen un enorme valor histórico cultural y arquitectónico que trasciende largamente su función especifica hasta el punto de que la mayoría de ellos una vez caducada su función se mantienen convertidos en museos o simples paseos para la visita y el goce del publico en general.
El primer faro de Argentina fue también el más austral del mundo, ubicado en la Isla de los Estados, perteneciente a la provincia Tierra del fuego, fue el faro San Juan de Salvamento, el que inspiro a JulioVerne en su famosa obra “El faro del fin del mundo”.